miércoles, 24 de junio de 2009

Poesía - Conquista


Condenado por la vida a un mundo en soledad

Quien pensaba que en un baile un desvió he de tomar

Desde lejos apareciste como un hada a hechizar

Y ya mi alma dice a gritos “no la dejes escapar.


Desmedido ciegamente me acerco a tu presencia

Sin notarlo raudamente te rocío mi esencia

Tus ojitos me trasmiten un poquito de paciencia

No contento obviamente te demuestro mi carencia.


Me deslumbro ante tu belleza- enamorado debo estar...

Te bautizo de princesa sos mi dama a codiciar

Poco a poco lentamente te suplico a caminar

Deseo tanto conocerte y el jardín te he de mostrar.


Y tomados de las manos iniciamos un conversar

Es amor ya no me engaño pues te empiezo a acariciar

Y el deseo tan exacto nos conduce a un besar

Quiera Dios no sea un rato sea solo un despertar.


Y las flores del verano son testigos de verdad

De un amor encadenado que encontró su libertad

Y el destino en un canto nos dirá con lealtad

Que fuimos hechos uno al otro para toda la eternidad.

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